Manifestación en Granada, 27 mayo, Aborto Libre, Legal y Gratuito

LA LUCHA FEMINISTA ES DIARIA, PERMANENTE, DIVERSA E INTERNACIONAL

El 27 de mayo salimos de nuevo a la calle para seguir ofreciendo resistencia a la mal llamada “Ley Orgánica de protección de los derechos del concebido y de la mujer embarazada”, que pretende sacar adelante el Ministro Gallardón. Y seguiremos saliendo a la calle para defender un derecho innegociable por el que históricamente ha luchado el movimiento feminista: el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y sobre nuestras vidas.

La Ley del 85 fue fruto de la lucha feminista, ya que, aunque insuficiente, logró la despenalización parcial de la práctica del aborto en tres supuestos: violación, malformación fetal y riesgo para la salud de la madre.

Esta ley no fue modificada hasta 2010, año en el que se aprobó la actual ley de plazos, en la que se respetaba la decisión de interrumpir el embarazo libremente durante las 14 primeras semanas y sin necesidad de permiso paterno en el caso de las menores de 16 y 17 años. Esta ley supuso una mejora con respecto a la del 85, pero a todas luces, insuficiente y lejos de la legalización total del aborto.

Ahora, la ley Gallardón tira por la borda todas estas décadas de trabajo y de lucha, desoyendo a las mujeres, restringiendo aún más la ley de 1985 por atender a las demandas ideológicas, económicas y electorales del PP y a las reivindicaciones de la Iglesia Católica, que una vez más impone su moral sin que nadie les haya votado.

De hecho, la eliminación del supuesto de malformación fetal la hace especialmente cruel. Aun así, si una mujer estuviera en uno de los dos supuestos en los que se permitirá abortar, el periplo legal al que se deberá enfrentar será realmente largo y agónico. Deberá contar con el informe positivo de dos especialistas, de centros sanitarios diferentes al lugar donde se le vaya a practicar el aborto, y posteriormente, deberá afrontar una semana de reflexión antes de confirmar su decisión de abortar.

En este día y siempre, hasta que nuestra voz se escuche, exigimos:

* La anulación de la actual contrarreforma del aborto del ministro Gallardón, la total despenalización del aborto, y que éste sea libre, gratuito y a cargo de la seguridad social.

* Una educación sexual efectiva a nivel social y educativo y no su supresión como sucederá con la desaparición de la asignatura de Educación para la Ciudadanía planteada en la LOMCE.

* La gratuidad de los métodos anticonceptivos para asegurar su acceso a toda la población, pues no son artículos de lujo como cree la derecha.

Nos negamos:

*A devolver la práctica abortiva a la clandestinidad, y a condiciones de higiene y seguridad de alto riesgo para la vi da de la mujer. Por esta razón, mientras llega la despenalización, apoyamos iniciativas feministas como la autogestión del aborto.

* A diferenciar entre abortos de ricas y abortos de pobres.

* A someternos al criterio de la Conferencia Episcopal, que nada sabe de nuestros cuerpos ni de nosotras, y sin embargo, dicta con soberbia las reglas y límites de nuestras vidas.

* A callar, a ser sumisas ante nuestras parejas, ante el cinismo de políticos de doble moral que pretenden gobernar nuestras vidas y nuestros cuerpos, y ante absolutamente nadie.

* A una maternidad no elegida, a un sistema que pretende imponer sus valores a las mujeres, por encima del derecho de cada una de nosotras a ser independientes y a vivir como queramos, a decidir si queremos o no ser madres : ser madre es un derecho, no un destino.

Y condenamos:

* La hipocresía del defender la vida del no nacido por encima de los derechos de las mujeres, independientemente de que sufra malformaciones o no.

* La hipocresía de forzar la vida de una persona con malformaciones mientras se realizan recortes en la sanidad pública y se suprime la Ley de Dependencia.

* Así como la hipocresía y la doble moral de muchos médicos que se declaran objetores de conciencia en la sanidad pública mientras practican abortos en sus clínicas privadas.

* Condenamos la contrarreforma del aborto que propone el ministro Gallardón que responde a los intereses del patriarcado y del capitalismo como su gran aliado y que profundiza en el control total de nuestras vidas; que nos impone un modelo de sexualidad y de familia que beneficia al sistema y nos relega a unos roles de género tradicionales que no aceptamos.

No permitiremos que nos quiten nuestros derechos ni que nadie decida por nosotras. Ni daremos un paso atrás en nuestra lucha. Exigimos que el aborto esté fuera del código penal y garantizado por la Sanidad Pública. Además reivindicamos una educación sexual real y un acceso libre a los anticonceptivos por parte de la población.

Por nosotras mismas, por la sociedad, por las que lucharon antes y por las que vendrán; porque ABORTÁBAMOS, ABORTAMOS Y ABORTAREMOS, decimos:

¡ABORTO LIBRE, LEGAL Y GRATUITO YA!!